y entonces me pregunto porque si el mismo universo fue el que un día lo puso en mi camino, no, corrijo, el que lo estampó delante mío para que, a pesar de mi despiste, lo pudiera ver... por qué ahora no puede hacer lo mismo? y lo lleva a irse de la ciudad cuando yo decido llegar a ella?
Acaso debe uno dejar las cosas así? porque como refrán de abuela por algo será! o seguir haciendo lo posible y lo imposible por volver a reparar es esos ojos maravillosos?
O por el contrario dejar de insistir y relajarse una vez más para perderse en los pensamientos y volver a esa nebulosa mental en la que siempre ando sumergida?
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