17 Jan 2008

Día 2

Hoy fue un día particular... de esos en que casi no amanezco pero feliz! con dolor en todo el cuerpo y una capacidad de reacción equivalentes a quien sabe cuantos grados de alcohol!!! (terrible)... llegué temprano a seminario pero al final entré tarde... si ajá, la hakama todavía me embolata... en fin clase: iniciamos con un overtone muy singular, buscando la vibración en diferentes partes del cuerpo... delicioso, y sensei dice la frase de la semana, si tu eres feliz contigo mismo el resto, la unidad, estará bien, sino si alguno está mal todo se desajusta! (cardumen-sentido de unidad)
Después de aquella sesión tan divertida, un poco de cardumen y zas!! De pronto inicia con esos ejercicios que a Z. sensei le encantan y que yo detesto con toda el alma, cuáles? aquellos ukemis voladitos (di tu saltando tres personas) haciendo maromas de mico (bueno a mi personalmente me encantan las maromas, pero las de Z. sensei que implican volar sobre otros tantos no!), pasando muy cerca del otro... claro sentido de unidad de moverse al unísono, pero como decirlo... digamos que yo siempre he sufrido de claustrofobia al hacer ejercicio... es decir me choca estar rodeada de mucha gente cuando hago mis movimientos, eso me pasa especialmente en danza y entonces en situaciones así de amontonamiento, mis movimientos dejan de ser libres, se vuelven abruptos y el placer del movimiento desaparece... pues bien hoy me pasó algo similar en la clase, todos juntitos en filas haciendo ukemis, medialunas y toma técnicas desde Shomen... frustrante... es decir ya saben todos que como que tengo un problema de negación con las técnicas y movimiento aprendido, movimiento que sigue su camino sin dejar huella en mi (no, no es tan cierto deja huella a nivel corporal más no mental... que en cierto modo es muy complicado) y entonces en fila con tiempos haciendo técnicas... la locura... si he de ser sincera poco disfruté esa parte (bueno sin mencionar que surgieron de la nada esos prejuicios escondidos hacia dos personas en particular... pero cuál es la manía de acosarlo a uno? de pisarlo? si quiere seguir que siga... o será que no la dejaba pasar, en fin!!
La segunda parte, técnicas desde shomenushi igual pero con espacio de a parejas en una forma normal... claro Z. sensei tiene toda la razón... si me cambian las condiciones en que desarrollo las técnicas, se me olvidan por completo, es decir era shomenushi ikkio!! pero no. se negaba a salir, es esa terquedad que raya en psicorrígidez la que salta ante cualquier cambio en el panorama... así las cosas la segunda parte, técnicas. Al principio difícil, venía con ese mal sabor de la primera parte y todavía no me acoplaba, práctica con Fp... dura... durísima porque claro terca, psicorrígida y prejuiciosa que soy... así las cosas como iba a disfrutarlo? pero bueno la práctica hace los suyo, los dolores desaparecen y las técnicas empiezan a fluir...
Me di cuenta que lo estaba disfrutando nuevamente cuando practiqué con D. no me salía la técnica, no la entendía y él, paciente tan solo sonreía... al final salió bien, fluída, gracias a que no me sentí presionada por mi ukke, sino más bien soportada, comprendida y desde ese entonces mi rostro cambió los movimientos volvieron a tener una razón y rescaté la sensibilidad de los pasos.
PD. J-s casi me baja la cabeza con el bokken y dígase bien, después que él me explicara cuál había sido el error que había cometido... segunditos después, era yo la que le volaba la hebillita de la cabeza, con un golpe, a mi querida F.... si si sí... sin remedio! jejejeje
PD2. Bonito observar el peso de la mente sobre el cuerpo, si la mente no quiere hacer un ejercicio no hay poder humano que mueva al cuerpo. Así me pasó con una de esas maromas. La idea era colocar las manos en las rodillas del otro y volar como haciendo una palomita!! divertido claro si no te entra el pánico, ese pánico que trato de combatir y que en ejercicios como éste salta dichoso inmovilizando mis movimientos... y así sucedió no hubo ni G. sensei que me pudiera mover... un hombre bastante más voluminoso que yo y no me pudo ayudar a terminar el ejercicio... por que si la mente no quiere...

2 comments:

ru said...

Ay Anita... pues me estás dando un regalo a mí al compartir así tu regalo! si entiendo bien, fue el mismo regalo que él me dio el año pasado justo en abril... qué bueno saber estas cosas del seminario. Leo y me da alegría al saber que están disfrutando así, pero al mismo tiempo un poco de tristeza de no estar allá. Si puedes, y ojalá te acuerdes, ¿lo podrías saludar de mi parte? He querido llamar al celular de alguno para saludarlo "personalmente" pero está difícil. Si puedes, dile que le mando otro saludo especial, muy especial, que espero pronto estar de nuevo con él en algún seminario y que lo recuerdo mucho, ahora disfrutando del aikido aquí en México, aprendiendo de otras formas, y que es hermoso el aikido, y es hermoso ser su alumna. ¿puedes decirle eso? Gracias! y disfruta mucho mucho tu regalo, si es el mismo, entiendo tu dilema, a mí me pasó. Pero bueno, los regalos, los actos generosos de la gente, no tienen por qué ocasionarnos dilemas morales. Ellos saben por qué lo hacen, y es preciso disfrutar lo que nos dan, pues es una bella forma de agradecerles, la mejor en realidad...

un abrazo largo! y disfruta mucho el seminario... para mí siempre, en todo seminario con él, ha habido una frase que me llega al alma y me toca justo donde lo necesitaba, y la que has puesto hoy ha sido una de esas... gracias, gracias, gracias!!!

maryoku said...

Hoola Ru! claro que le daré tu mensaje... ya puse un recordatorio en el celular, porque no hay que fiarse de mi memoria de pollo! Y tienes toda la razón he intentado disfrutarlo al máximo, tanto así que ya duele que sea tan corto! esa sensación de felicidad y de paz conmigo misma que me dejan sus clases fue la razón por la que el año pasado en esa clase de abril después del seminario, decidiera involucrar el aikido en mi vida nuevamente.
Te mando un abrazo muy fuerte!